Los horarios para el desarrollo de las experiencias de aprendizaje en una educación a distancia deben organizarse en periodos que estén de acuerdo con la edad, modalidad, condiciones y características de los/las estudiantes. También es importante considerar el interés y la motivación que sientan los estudiantes cuando participan de una experiencia de aprendizaje.
En la educación a distancia los horarios necesitan replantearse. No es saludable mantener a los estudiantes muchas horas frente a la computadora, viendo televisión o haciendo trabajos. El horario de estudio se debe organizar en periodos más cortos, de acuerdo con las edades, garantizando que no se agobie a los estudiantes con muchas actividades escolares. Es necesario aclarar que los momentos en los cuales el estudiante interactúa con el docente a través de algún dispositivo, el docente los emplea para brindar orientaciones, retroalimentación, informar y acompañar a los estudiantes en la comprensión de lo que van a aprender y los criterios de evaluación; mientras que en el cual el estudiante realiza las actividades propuestas por el docente, que son posibles de realizar de forma autónoma, que son interactivas y que se conectan con sus saberes y lo ayudan a avanzar, estas actividades han sido previstas por el docente para que se puedan realizar de acuerdo con los ritmos de los estudiantes.
Se debe considerar que el tiempo adecuado para un niño de inicial a 2.° grado de primaria frente a la pantalla no debe ser mayor a 1 hora; para niños de 3.° a 6.° grado de primaria, no más de 2 horas; y, en secundaria y en ciclo inicial, intermedio y avanzado de EBA, puede ser de 2 bloques de 2 horas cada uno.
Adaptado de la RVM N°.093-2020-MINEDU y de la RVM N°.121-2021-MINEDU
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